Sed bienvenidos...

... los que estáis asqueados de toda la Tontería que nos rodea, los que estáis hasta los cojones/ovarios de aguantar imbéciles e incompetentes, los que tenéis que reventar y no podéis porque vuestra castrante moral judeocristiana os lo prohibe, los que sufríais de pequeños las mofas de seres inferiores, los que esforzándoos no obtenéis recompensa, los que vivís en un mundo que no es para vosotros, los que sabéis parte de la verdad pero os toman por locos, los que necesitáis opinar sin ser juzgados por ignorantes, los que pudiendo cambiar las cosas aún dormimos.

jueves, 24 de febrero de 2011

PUTOS VAGOS

Hermanos, hermanas...

Detecten ustedes la dificultad de la población media para pronunciar la palabra “pograma”, pero admiren no obstante con que rapidez y soltura te aprende a decir cualquier fulano el término “fibromialgia”, cuando se halla motivación por medio.

En esta cultura nuestra del “tú hazte el tonto”, encontraremos fácilmente multitud de incentivos para hacerse con un diagnóstico de minusvalía, o cualquier trastorno médico o psicológico que a uno le libere del infame e indigno acto de trabajar u otras actividades esforzadas. Como hemos dicho otras veces, el español ya se cree un noble desde la cuna, y currar siempre fue de proletario bajuno.

Estos pecadores dicen que están depresivos cuando en realidad quieren decir deprimidos (esa cuestión lingüística es sumamente importante). Pero “depresión” suena jodido; quiero decir, que suena estupendamente, suena a baja, suena a que le den por culo al tajo que prefiero el sofá. De repente todo Cristo está de baja por depresión. Muy posiblemente sea el tema 2 de las oposiciones a funcionario. Lógicamente las ventajas de estar depresivo-deprimido son lógicas y cuantiosas (de momento, cobrar mientras te rascas).

Los fibromialgiosos que te salen de debajo de las piedras son para echarles de comer a parte. La de gente sensible que hay que convierte en enfermedad sobre papel el típico dolor generalizado de cuerpo debido a no hacer ni puto ejercicio con él. Me duele, ¿dónde?, en tos laos… Claro que sí, así de fácil. Yo me imagino que al que tenga fibro de verdad le hará una gracia loca que se hagan pasar por afectados de esta mierda. Imagínense: hay quien tiene esta enfermedad y además depresión (aderezada con unos poquillos ataques de ansiedad de estos de simularlos y te vienen todos a cuidar y darte agüita), cuando en realidad lo que tienen es los músculos atrofiados del infrauso y la flojera crónica, y un aburrimiento de tres pares por falta de iniciativa, además de ganas de ser el centro de atención y no dar golpe. No hay mejor excusa que fingir una crisis de ansiedad – muy generalizado en la población cañí femenina – para quitarse de en medio las obligaciones y que te den lo que pides; y eso lo sabe hasta la maruja más bordeline del bloque. Pero lo peor es cuando se agencian una paga por ello. Hay gente en silla de ruedas sin piernas ni pensión, mientras muchos de estos pecadores se toman 30 cervezas a costa de nosotros y sin apechugar. Toda esta fanfarria de titiriteros irredentos no tienen alma ni perdón de Dios.

Lo malo es que esto empieza desde que el español es infante. “Mi niño es especial” es una frase tan repetida como “mi niño en verdad es inteligente”. Ahora todos los niños son especiales por muy gilipollas que sean, para los ojos de los padres. Hace unos años fue la dislexia, luego la hiperactividad… después vino el síndrome de Asperger, y ahora el bullying. A cada trastorno que sale hay una caterva de imbéciles que se apuntan a tenerlo, con tal de trabajar menos que el prójimo, dar penita, y engrosar la lista de concursantes del Gran Hermano. Antes los padres soñaban con que sus hijos les salieran bien (formales y limpios), y ahora sueñan con conseguirle al niño una discapacidad que les aporte a los progenitores dos cosas: librarse de la responsabilidad de educar para delegarla en la Providencia, y coger el dinero de las becas por discapacidad (seguramente para renovar la cocina), o lo que es lo mismo, chupar del bote.

Señor… ya se que de vez en cuando me repito con estos temas, pero me preocupa sobremanera los seres con los que estamos poblando el mundo. Llévales a ellos o llévame a mí. Mándanos una señal, un tsunami o lo que tengas a bien para acabar con esto.

Al próximo puto vago que escuche que se coge una baja de tres años porque le duele la barriguilla, le saco los ojos y se los meto por el culo… y de paso ya tiene la primera colonoscopia gratis.

Podéis ir en paz.

(Demostración: banalización de la patología, a cualquier cosa la llaman ansiedad)



viernes, 18 de febrero de 2011

C.S.I. TREBUJENA

En algún lugar de la piel de toro...

Entran en escena el agente especial Grissom, de todos conocido por su trajinar en USA, con su fiel compañero Warry (el negro, vamos), ataviados elegantemente como corresponde en estos casos de trascendente importancia. Sobre el suelo del hall, un fiambre. Al lado del muerto, un par de picoletos:
Grissom: Buenas tardes, agentes.
Sargento: A las buenas.
Grissom: Caballeros, ¿nos ilustran sobre lo ocurrido?
Sargento: En el acto. Verá. Aquí de cuerpo presente, puede ver lo que viene siendo un difunto.
Grissom: Sí, ya. ¿Qué sabemos hasta el momento?
Picoleto: El susodicho responde o respondía al nombre de pila Manolo.
Warry: Manolo qué.
Picoleto: No lo sabemos aún, el carnet estaba borroso.
Grissom: ¿El carnet de identidad estaba borroso? ¿cómo es posible eso?
Sargento: No, mister... el sujeto no portaba el subsecuente DNI. Hemos tomado su identificación del carnet de socio del Betis encontrado en la parte interior del pantalón o bolsillo.
Grissom: Emm... entiendo. En ese caso... Warry, recopile los indicios del crimen que puedan constituir una prueba.
Picoleto: ¿Mande? Verá agente, la mujer de la limpieza llegó antes que ustedes y le pegó un fletao a todo esto.
Grissom: (quitándose las gafas incrédulo) ¿Cómo? ¿Y le permitieron tal cosa?
Sargento: ¡Bueno! menuda es esta. Decía que ella trabajando aquí, nadie le iba a tachar de guarra, que ella era mu limpia, y ya se podía poner el alcalde en cruz que su coño hacía su trabajo como todos los días... y vamos, que no había quien pudiera con ella, mister.

Warry: Jooooder (en bajito y volviendo la cara para otro lado).
Grissom: A ver, a ver... olvidémoslo. Concentrémonos en mandar lo antes posible una muestra de ADN para su análisis y sabremos en una hora su identidad y puede que la del asesino.
Sargento: Puuffff... eso hay que mandarlo a la Delegación Provincial, y que le de el visto bueno el juez... y lo mismo el defensor pone una medida cautelar para que no prospere lo del ADN por considerarse anticonstitucional... y luego los papeles que hay que firmar por duplicado que luego se traspapelan, máxime sabiendo lo aficionado que es Paco el administrativo a darle al espirriaque... Mucho lío, mucho lío.
Grissom: ¡Pero vamos a ver, coño... ¿estamos tontos aquí o qué? El juez, en cuanto aparezca para levantar el cadaver, digo yo que dará la venia para todo esto!
Picoleto: El juez está de vacaciones y no vuelve hasta el mes que viene.
Grissom: ¡Coño, pues el que esté en funciones!
Sargento: Sí, si está, pero está de baja.
Warry: Hostia, yo me quiero ir de aquí, ya.

Grissom consulta el Google Maps en su PDA, asegurándose de la posición geográfica de España y comprueba que este país efectivamente no está en África.
El sargento picoleto se coloca el paquetillo y se toca con la otra mano una punta del tricornio en gesto de saludo.

Sargento: Dispensen. Mis hombres y un servidor nos retiramos de la escena, hasta más ver. (Al volverse, al compañero se le cae del bolsillo un cigarro personalmente elaborado con tonos verdes).
Picoleto: Uy. Nada, esto es de un alijo que le pillamos a una colombiana que traía género en lo que viene siendo mayormente el conducto vaginal, y lo hemos confiscado para su ulterior destrucción, por supuesto.

Grissom, en un insigth revelador, determina que su sueldo de funcionario nunca le pareció que estuviera a la altura de sus funciones, y visto lo visto, decide que a la primera de cambio se vendrá para acá para montar un imperio del crimen con el que ganar un pastón formidable. Después de todo, aquí no le van a empapelar ni hartos de vino. Porque de una cosa está seguro: la gestión de cualquier cosa en estos lares es, lo que viene siendo, un mojón.

Podéis ir en paz.

sábado, 12 de febrero de 2011

BERLUSCONIZACIÓN

Hermanos, hermanas...

Hace una semana, compartía con un Hermano de esta casa y gran amigo de la infancia, una de esas tardes en las que dos tipos se juntan, para delante de una barra, recordar viejos tiempos y maldecir mujeres. Acababamos hablando del concepto creo que ya existente de "berlusconización" futura de la política y la cultura españolas. Ingenuos de nosotros, hablábamos de tiempos venideros, cuando en realidad, este fenómeno ya se asentó aquí hace tiempo, y a las pruebas, así como al ejemplo, me remito:

El concejal madrileño Álvaro Ballarín, de cuerpo presente en el retrato, contrata hace unos meses a su nueva asesora de cultura (repito, Asesora y de Cultura), a la ex miss Barcelona y portada de Interview, la señorita Martínez, cuyo currículum vitae abruma al más preparado por su 3º de Arte Dramático, su nivel medio autoevaluado de inglés y equitación (de las clases que dió cuando era chica), su conducción de programas "call tv" de madrugada - de estos de llama ya gilipollas que te pierdes el premio millonario por acertar la palabra clave -, y sus tetas nuevas con peculiaridad de mirar una a Cuenca y otra a Manhattan.












Pues muy bien que hace, el hombre. Tiene que pensar en el bienestar de la concejalía, no es lo mismo ir a trabajar y tomarse un cafelito en la máquina, que salir bien mamado del despacho. Miren esa cara de concejal. Sus rasgos indican claramente que es culpable. Pero joder, yo le comprendo. Yo prefiero una tía buena agradecida que un choco competente. Total, quién va a notar la diferencia en la gestión de la cultura de Madrid. Ni el Tato, joder.

A la buena vida. Viva la Virgen. No nos engañemos, ¿para qué sirve la preparación académica o la experiencia cuando se tiene un buen par de tetas siliconadas? Para nada. Nasti de plasti.

La influencia italiana a través de la educación global telecinquera nos envuelve. Viejos verdes atiborrados de botox y billetaje gobernando ayuntamientos, y asesoras buenorras y jamonas que son seleccionadas desde Gran Hermano. El ciudadano promedio mira las simpáticas travesuras de Berlusconi y sonríe admirado mientras envidia al viejo siliconado, que disfrazado de Mister Mikonos en su mansión Playboy, se calza a las jovencitas pechugonas ávidas de dineros y fama fácil, remuneradas con la pasta que anhelan los parados del país.

Normal que este listo del PP (también salpicado por el Gürtel) se apunte al carro. Pronto vendrán los tiempos en que el presidente español de turno también llame a Sálvame Deluxe para desmentir y de paso poner a parir a tertulianos encocados.

La penitencia para estos es: ¡el celibato eterno!



La pena de todo esto es que los que valen siguen mordiendo el polvo, y los aprovechados sin mérito ninguno (quizás por carecer de vergüenza torera y refiriéndome a unos y a otras) continuan dirigiendo nuestras vidas y llevándose pensiones vitalicias por no hacer nada. Bueno... por no hacer nada no. Tirarse a tías buenas es algo, y además está muy bien.

Podéis ir en paz.

sábado, 5 de febrero de 2011

LOS ÚLTIMOS HOMBRES LIBRES

Hermanos, hermanas...

Esta semana en el telediario se mostraba esa foto de la tribu que desde su neolítica aldea amazónica, amagaba con asaetear el avión desde el que eran observados, quién sabe si para protegerse del monstruo volador, o porque en sus mentes aparece el profético concepto de "deforestación". El caso es que me resultó sugerente la idea de que ese día en que era descubierto este bastión de los últimos hombres libres del planeta, la otra noticia en portada era la de la revolución en el mundo islámico al otro lado del globo, que orquestada o no, con intereses bajos o sin ellos, llevan a cabo hombres que ya dejaron de ser libres hace miles de años, y que pasando por las diversas etapas de la historia, ahora luchan por catar alguna viruta aunque sea pequeña de esa libertad que un día, cuando eran salvajes nómadas africanos, vivieron.

Estuve en Egipto hace unos años. Cuando ves a los egipcios en la calle ves un montón de tíos desocupados, corrillos ociosos en las plazas rascándose las pelotas, sentados en las aceras al modo chimpancé. Te preguntas por el índice de paro y por los oficios alternativos al comercio omnipresente. No puedes evitar ser invadido por ese sentimiento occidental de superioridad y verlos, o como vagos risueños o como embusteros mercaderes. Pero desde que en Argelia ese foco débil pero crónico de subversión se propagó por Túnez hacia el este hasta llegar a Yemen, empiezas a ver a estos tíos de otra forma. Porque por muy medievales y aficionados al gapo callejero que sean, estos están haciendo allí lo que no hicimos los españoles en cuarenta años con Paquito.

Nosotros, los de la machura ibérica y la honra, la bravada y los cojones, esperamos a que la espichara el viejo para luego ir diciendo que España luchó por la democracia. Sí, ahora mismito. Estos mohamé están en la calle dejándose matar para conseguir algo y lo están haciendo partiendo desde una estructura social del medievo, desde la nada con un par, con convicción y sin tomar represalias cuando se los mata. Pues no serán tan chimpancés como los vemos desde aquí. A ver si le llega el día al niñato de Marruecos y le ponen de una vez mirando a la Meca.

No tengo ni idea de cómo será el nuevo Egipto, ni cómo el mundo árabe futuro. Están pidiendo salir de una situación mala para meterse en otra menos mala. Quizás pidiendo libertad para tener que aguantar que los familiares de concejales corruptos de un ayuntamiento tengan pagas millonarias por invalidez falsa, en vez de situaciones peores como que la pasma te coja por la calle, te lleve a la comisaría y te den de hostias sin tener idea de por qué. Pues vale la pena, no hay color. Ya era hora de que despertaran. Me alegro de su toma de conciencia. Aquí siempre estuvimos muertos y lo seguimos estando. Aquí preferimos montarla por la copa del mundo de furbo, pero si se trata de que te sodomicen, uno prefiere tomar a gusto y dar las gracias después.

Pobre tribu de salvajes, no saben lo que les espera cuando ingresen en este club de culturas suicidas cuyo fin es complicarle la vida al prójimo. Adéntrense en la selva, amigos... piérdanse y no vuelvan a la aldea, que no los descubran. O pronto los veo teniendo que pelearse con un grupo de tiranos el mínimo derecho a respirar o a pensar lo que os de la gana. Sálvense ahora, que aún están a tiempo.

Podéis ir en paz.

martes, 1 de febrero de 2011

TODOS LOS TONTOS TIENEN SUERTE

Todos los tontos tienen suerte, hermanos.

Quién no conoce a alguno, que no dando palo al agua, ha sido recompensado por la vida con un piso de VPO, o en su defecto agasajado por sus padres con vivienda gratis, mientras tú te endeudas con un banco o con alquiler eterno para los restos… Ser a veces un incompetente mequetrefe, dar imagen de desvalido locuelo-simpático y descuidado, y fomentar tu dependencia, provoca la mayoría de las veces que, por suerte o por la ayuda ingenua de los que nos curramos la vida, estos homínidos gocen de una vida plena sin previo mérito. En efecto, queridos. No parece ser requisito sine qua non, pero casi.

A todos los tontos los colocan en puestos bien remunerados.
A todos los tontos les tocan premios.
Todos los tontos se salvan en los accidentes mortales de tráfico.
A todos los tontos los eligen las tías buenas. (Y lo mismo en femenino).
Todos los tontos llegan en el momento exacto al sitio oportuno.
Todos los tontos son mantenidos por incautos trabajadores.
Todos los tontos tuvieron profesores que les pasaron la mano.
A todos los tontos les toca el examinador más buenazo en el práctico del coche.
Todos los tontos se libran de la multa.
Todos los tontos aprueban por potra.
Todos los tontos consiguen ayudas sociales y becas infladas.
Los tontos no iban a por algo pero lo consiguieron a mejor precio.
Ningún tonto paga las consecuencias de las estupideces que dice o hace. Otros lo pagarán por ellos.
A todos los tontos los Reyes les echan un coche.
Todos los tontos tienen enchufe en donde sea.
A todos los tontos les cae una herencia millonaria.
Todos los tontos consiguen lo mismo o más que tú sin esfuerzo.

¿Por qué? ¿Es una compensación que Dios Nuestro Señor aporta a los seres de esta condición para ayudarlos a sobrevivir (con lo cual Dios estaría en contra de la selección natural)? ¿Es simple suerte o la Ley de Murphy aplicada a la justicia social? Hagamos introspección y análisis de las situaciones conocidas y sopesemos que quizás simplemente sea, que nosotros somos los verdaderos tontos. Y ellos sean los “listos”.

Podéis ir en paz.