ROSARIO DE HIPÓCRITAS

Yo estoy a favor de la integración... pero el mongolito ponedlo en otra clase que no sea la de mi hijo.

Yo estoy a favor de integrar a los gitanos... pero en mi bloque de pisos no.

Cuando me quedo preñada me creo la Virgen María con mi niño superespecial... pero si me quedé de penalty tengo derecho a liquidarlo.

Soy provida... pero estoy a favor de la guerra y de la pena de muerte.

Tengo derecho a que me escuchen... pero yo a los demás no.

Con la crisis no tengo para nada... pero rechazo todos los trabajos mientras mis padres no me orten el grifo. 

Quiero a todos mis amigos... pero odio a mis padres.

Sigo queriendo a mis amigos... pero los pongo a parir a sus espaldas por matar el aburrimiento.

El día de mi boda es el más feliz del mundo... pero me separo a los dos años.

Denuncio al profesor por mirar mal a mi niño... pero yo le inflo a ostias en casa.

Riño a mi hijo para que lea... pero yo no leo desde que salí del colegio.

Le digo que no diga tacos... pero me escucha decirle al padre "golfo hijo de perra".

Soy espiritual y muy zen... pero cambio de coche pepinero cada año.

Soy amigo de mis amigos... pero sólo estoy para las copas.
Quiero a mis padres un montón... porque me dan dinero.
Te digo lo guapa que estás... mientras pienso lo zorra que eres.
Digo que soy único y superespecial... pero se que soy un mediocre del montón.
La generosidad es lo primero... pero a mí no me pidas ni la hora.
Corrijo a todo cristo... pero no tengo ni el graduado escolar.
La humildad es una gran virtud... en los demás.
Te quiero porque eres mi mejor amigo... y porque te puedo manejar facilmente.
Veo los documentales de bichos de la 2... mi animal favorito es el Belén Esteban común.
Soy una persona con valores religiosos... por eso me paso por el forro a los demás y los piso cuando me conviene.
Soy muy sociable... por eso tengo que beber y coger el punto para relacionarme con los demás.
Soy una máquina sexual... por eso tengo que venderme a cada rato diciendo lo grande que la tengo.
Siempre digo la verdad... menos cuando me interesa.
Yo respeto a los demás... si me caen bien.
Me importa un mojón lo que piense la gente... por eso siempre estoy cabreado y decepcionado con ellos.

Una hermana inventó hoy una penitencia para estos fantoches que me pareció propicia: a cada hipócrita pongasele en mitad de una plaza llena de gente, en pelotas, en pleno invierno, y désele una manta de palos.
Más claro, agua.


Podéis ir en paz.