Hermanos, hermanas...
En la tradición postnormanda inglesa se cuenta la leyenda de un fulano que robaba a los ricos para repartir esas riquezas a los pobres. No era Errol Flynn, ni Kevin Costner. Le llamaban Robin Hood. La historia la conoce hasta el último alumno de la ESO (que ya es decir).
Supongamos, en un ejercicio de imaginación y fe, que este tipo representa, digamos... a un protón. Si, si... una partícula subatómica cualquiera. Al tiempo.
Hoy un hermano nos aporta estos recortes. Estúdienlos.
El gobierno es como lo contrario del Señor Hood. Roba a los pobres para darlo a los ricos. Así, por toda la cara (esto ya está ampliamente hablado en esta parroquia). Incluso las cantidades señaladas son las mismas, los mismos euros que se restan aquí y se añaden allí. Dicha institución es como el "Antirobinhood". No se si me explico. Esto, llevado a lo cuántico significa que el gobierno es... un antiprotón (partícula de antimateria igual al protón, formado por los mismos quarks pero con carga negativa).
Robin es un ser humano. El gobierno lo componen seres humanos. Pero no es lo mismo. Adivinen el signo de la carga. Y entendido esto, investiguen qué pasa cuando colisionan una partícula de materia y otra de antimateria en el microcosmos. Yo se los diré, si su hooby no es la física: que al tomar contacto las dos se aniquilan mutuamente, resultando de esto un reventón de energía de tal calibre que se caga la perra y todo lo que pille por medio.
Un día, con tanta tontería y tanta hostia, esto va a pasar pero a nivel macro. Y puestos a ponerse de un lado yo lo tengo claro, y sólo quiero añadir una cosa:
Viva el protón, Robin Hood, y la madre que los parió a los dos.
Podéis ir en paz.
En la tradición postnormanda inglesa se cuenta la leyenda de un fulano que robaba a los ricos para repartir esas riquezas a los pobres. No era Errol Flynn, ni Kevin Costner. Le llamaban Robin Hood. La historia la conoce hasta el último alumno de la ESO (que ya es decir).
Supongamos, en un ejercicio de imaginación y fe, que este tipo representa, digamos... a un protón. Si, si... una partícula subatómica cualquiera. Al tiempo.
Hoy un hermano nos aporta estos recortes. Estúdienlos.
El gobierno es como lo contrario del Señor Hood. Roba a los pobres para darlo a los ricos. Así, por toda la cara (esto ya está ampliamente hablado en esta parroquia). Incluso las cantidades señaladas son las mismas, los mismos euros que se restan aquí y se añaden allí. Dicha institución es como el "Antirobinhood". No se si me explico. Esto, llevado a lo cuántico significa que el gobierno es... un antiprotón (partícula de antimateria igual al protón, formado por los mismos quarks pero con carga negativa).
Robin es un ser humano. El gobierno lo componen seres humanos. Pero no es lo mismo. Adivinen el signo de la carga. Y entendido esto, investiguen qué pasa cuando colisionan una partícula de materia y otra de antimateria en el microcosmos. Yo se los diré, si su hooby no es la física: que al tomar contacto las dos se aniquilan mutuamente, resultando de esto un reventón de energía de tal calibre que se caga la perra y todo lo que pille por medio.
Un día, con tanta tontería y tanta hostia, esto va a pasar pero a nivel macro. Y puestos a ponerse de un lado yo lo tengo claro, y sólo quiero añadir una cosa:
Viva el protón, Robin Hood, y la madre que los parió a los dos.
Podéis ir en paz.
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