Todo aquel con dos dedos de frente sabe que el capitalismo es la esclavitud moderna y el engaño mayor de los últimos siglos. Muchas veces nos hemos preguntado quien maneja los hilos. No es el presidente de los Estados Unidos, no es la Unión Europea. Estos sólo son títeres. ¿Dónde está el titiritero? Están escondidos. Casi invisibles, más allá de la burbuja individual en que nos metieron a cada uno de nosotros. Esa burbuja en la que te hacen trabajar, producir y consumir sin límite, para el beneficio sólo de ellos. La burbuja bonita llena de marcas, lujos, derechos y diversiones pagadas.
Hace mucho tiempo ya desde que Morgan el banquero, Rockefeller el empresario y Warburg el hijoputa se unieron para hacer el mal, cual supervillanos de cómic, perpetrando su plan desde la llamada Isla de Jeckyll (USA), con la ayuda del ministro Aldrich. Aunque todo parece de guión de James Bond, no es ningún secreto y se puede contrastar perfectamente. Allí inventaron la primera gran máquina mortífera, la Reserva Federal, o lo que es lo mismo, el organismo encargado de cambiar al gusto las reglas del dinero. ¿Cómo consiguieron hacer que se aprobara esta máquina y su ley para privatizar las normas del capital? Usando las influencias y la 1ª Guerra Mundial. Luego usarían otras cosas igual de malévolas, como el Banco Central y el Fondo Monetario Internacional, que a parte de para dirigir maléficos planes también servían para endeudar a los países a base de conceder créditos que luego no podrían pagar, así como subir hasta el infinito los tipos de interés, es decir, cobrarte 3 veces lo que te prestaron. (Aquí expongo la cara de dos de estos hijos de la grandísima, para que sepamos a quién debemos las cadenas: JP Morgan y JD Rockefeller).
Esta pandilla de malnacidos, darwinistas neoliberales, lo que querían es ser libres para comerciar sin reglas a las que atenerse y lo consiguieron. Apurando, opino que es algo que se remonta más allá de la Revolución Francesa (donde obtuvieron conciencia de poder); retrocederíamos a la Reforma y la aparición de la burguesía en la Edad Media. La razón es evidente, crecer sin límites comiéndose a los más débiles. Evidentemente esto llevaría al oligopolio de las grandes corporaciones (grupos internacionales de grandes empresas regidas por unas pocas familias) con más poder real que un Estado, en muchos casos con mayor Producto Interior Bruto. Lógicamente los dos sociópatas de la foto están gracias a Dios, fiambres; pero su semilla sigue viva y regenta el cotarro, y los podemos ver, no creáis que se esconden. En los dos últimos años han estado recibiendo inyecciones de dinero para mantener estos lobbys: dinero de las personas que se matan a trabajar de las que luego dejan morirse en una esquina cuando no les llega para pagar su casa. Se las embargan bancos y aseguradoras como AIG, que recibieron estas inyecciones. Es curioso como los salvamos mientras nos sangran y nos echan de nuestras casas. No debe extrañar, puesto que mientras estos exprimen a todo cristo, mis vecinos de abajo difícilmente atinan día tras día a articular la palabra: “PENALTY!!!”. (En la foto los herederos de estos personajes: James Dimon de JP Morgan, Loyd Blankfein de Goldman Sachs y David Rockefeller, como no, por lo menos para ponerles cara a algunos de los que están vivos).Estas inyecciones de pasta las aportan los gobiernos con tu dinero, para mantener a los mercados (al capital) tranquilo, sin sobresaltos, para que produzcan y ganen. Lo que pase contigo les importa un carajo, porque lo importante es que trabajes, consumas, no pienses, te distraigas con el fútbol y el cuore, no leas, y sobre todo no entiendas ni pajolera de sus términos burocráticos, no vaya a ser que des con la tecla y dejen de exprimirte como una pila. Mientras, 2 de cada 3 productos fabricados vienen del fuero del mismo tío ultrapoderoso. Esos que usaron muchas veces a algunos presidentes como Nixon o la dinastía de los subnormales Bush, y finiquitaron a otros como Kennedy. No deja de ser evidente cómo muchas veces han dejado clara la influencia para ganar parné provocando guerras y eventos varios para luego beneficiarse ya sea reconstruyendo, ya sea recogiendo recursos. Véase simplemente las llevadas a cabo desde Estados Unidos durante el último siglo (no hablamos de Israel o Europa): desde el auto-hundimiento del Maine que provocó la guerra España-USA para ganar la posición estratégica del Caribe e instalar gobiernos títeres, al más reciente 11 de Septiembre y las armas de destrucción masiva inventadas para las guerras preventivas con el Medio Oriente, donde el trofeo son la posición estratégica, el petróleo, y la reconstrucción urbanística (máxima beneficiaria: Halliburton, corporación de Cheney, 2º de Bush).
Uy, se me olvidó el Crack del 29. No es una guerra pero también hubo beneficiarios ¿quién?... los mismos. Yo de ser ellos, es decir, un cabrón con pintas, haría lo mismo, claro. Subir los intereses hasta que la gente llegue al límite de casi no poder, e hincharles con aseguradoras a tope, ahí… que se jodan, que no levanten cabeza. Endeudados hasta el flequillo. Que esa es otra, la deuda. Tiene cojones que el banco te compre la casa al taco con dinero que no existe en realidad (es sólo una cifra en el papel, un número con muchos ceros digitalizados en el ordenata) pero tú se lo tengas que pagar 3 veces en dinero de verdad y durante 40 años. Los usureros y prestamistas de nuestro tiempo, antes criminales, ahora compadres de los estados. Lo dicho, una obra maestra de ingeniería para construir una coyuntura esclavista. Objetivo: centralizar el poder a escala mundial en las pocas y descomunales corporaciones teniéndolo fácil sobre una o dos confederaciones de países como la UE, y con unas pocas monedas oficiales, a poder ser una.
Y nosotros sin rebelarnos porque ya somos como esos muertos vivientes / consumidores de George Romero.
Y nosotros sin rebelarnos porque ya somos como esos muertos vivientes / consumidores de George Romero.
Siempre que hablo de esta mierda conspiranoica, uno de estos zombis se acerca para recordarme que estoy loco y soy un amargado y un agorero. Las víctimas del capitalismo son paradójicamente sus mayores defensores. Pero la verdad es que todo lo que he ido diciendo lo he visto cumplirse, y no porque sea un máquina en materia de economía (de la que se sólo un poquito), sino porque aplico la historia, esa historia que en movimientos cíclicos la gente olvida debido a su inoperativa memoria a corto plazo, porque el pasado no sirve para nada, y el futuro no existe, sólo el presente es real. Pues ese futuro que no existe nos sodomizará gratis.
Me remito a Eric Fromm, Ortega y Gasset, Marcuse, el actual Santiago Niño (que aunque se parezca más a Tristanbreiker que a un hombre respetable, es el único que hasta ahora ha acertado hasta en el color de los calzoncillos que llevo hoy), mi grandísimo y admirado antropólogo Marvin Harris, todos grandes científicos y hombres de fiar que lo han profetizado siempre con margen de error casi nulo. Hombres no como los que mandan ahora, amanerados politiquillos venidos de la mediocre élite de la alta burguesía internacional. Tipos con honor, que te explican tranquilamente que todo esto no es más que una coyuntura de dominación más, que en breve colapsará una vez más y no por última, salpicando de mierda sobre todo a nosotros. La gastroenteritis, la vomitona purgativa del sistema.
Hoy no hay consejo. No cabe. Esto es sólo una revelación. Y no es nada nuevo. Lo nuevo va ser el “por culo” de la próxima década, esta crisis sistémica en la que (no nos engañemos) aún no hemos entrado: el paro más allá del 30%, los desahucios, el no llegarte para comer (lo nunca visto hasta ahora), la desaparición de la clase media, la caída de toda empresa mediana de cualquier padre de familia, el triunfo de estos Hijos de la Gran Puta, que manejan los hilos.
Hermanos… minuto de silencio por los que lo pagarán: nosotros las víctimas. UN MOJÓN!!!
Esto hay que cambiarlo simplemente porque sólo tenemos una vida; no hay otra. Como decía el fitipaldi este en una canción: “porque la vida se nos va, como el humo de ese tren, como un beso en un portal antes de que cuente diez”.
HERMANOS… REVOLUCIÓN.
Podéis ir en paz.
(Sueldo de un traductor de la UE: 6.000 euros por hora)
ResponderEliminarEsto es Montilla, el presidente de Cataluña, que va a hablar al congreso europeo y le sale de los cojones hablar en catalán. Chaves, (uno de los 3 vicepresidentes que tiene el gobierno español) se pone los auriculares para poder entender a su compatriota Montilla, nacido en Córdoba, catalanoparlando y generando un gasto de millón de pelas la hora. Tócate los hue***!!!
Que no digo que el catalán no sea un idioma, que lo es. Lo digo porque a tí te piden austeridad, recortes, ahorro y consumo a la vez (que no hay quien lo entienda), pero esta gente te invierte varios miles de euros en un capricho.
Sobre las grandes corporaciones que mueven los hilos... recuerdo a los malos de Superman que querían dominar el mundo. Joder, no eran cuentos. Era real.
Memorable prédica. Como dijo alguien, sólo cabe decrecer por devoción o por obligación. Constantemente se nos bombardea con el discurso de que es necesario crecer para crear empleo, incluso se atreven a hablar de crecimiento sostenible, ¿es posible crecer sin depredar? ¿es posible crecer infinitamente sin esquilmar el medio que nos sostiene? ¿es posible crecer sin que los sufridos asalariados consumamos fruslerías que nos esclavizan? ¿no sería más razonable repartir el trabajo consumiendo menos y viviendo más? Desgraciadamente el poder perpetuará su dominio a costa de mayores cuotas de desigualdad, pobreza, opresión y exclusión. Creo que fue Tomás Meabe quien dijo que el capital no tiene ni patria ni corazón, y su moral es la moral del bolsillo. Como bien dices, estos cabrones ignoran al resto de la humanidad y no les importa practicar la política de tierra quemada. Lo tenemos muy crudo. Saludos cordiales.
ResponderEliminarPor fin le ponemos cara al mal, aunque de poco consuelo nos vale.Como sé que tampoco me vale de alivio pensar en que ,un día en el futuro, el proyecto Venus de Joseph Fresco se pueda poner en marcha.
ResponderEliminarNo puedo evitar que mis "gónadas", como dice nuestro predicador, me hiervan sobremanera cuando veo la cara de un hijoputa de estos.
Las mentes maquiavélicas de las películas de acción o dibujitos, en los que éstos sueñan con ver arder el mundo son santitos de tetita comparados con estos mamonacos.Aunque tuvieran cien vidas no podrían gastar su fortuna.Si hasta los tres millones al día que gana Borjita Thyssen "by the face"es una propinilla.
Saber que les pagamos sus cenas de 60.000 euros en un restaurante, sus putitas de lujo y queroseno de sus jets es para pensarse en serio eso de contratar a Bruce Willis para que les meta un balazo desde un kilómetro.
Aprobecho para daros la dirección de un periódico que edita Santiago Alba. Rebelion.org. Santiago Alba es un tipo interesante. Para que os sea más familiar es el que creó los guiones y también letras del programa infantil "Bola de Cristal".
¡Viva el Mal!¡Viva el Capital!
Como dijo mi abuelo, el dinero está manchado de sangre, cuanto más dinero, más sangre... la nuestra, en concreto. Por lo demás amén a todo.
ResponderEliminarAl hilo de citas de abuelos, el mío suele decir: Trabajo y economía son la mejor lotería.
ResponderEliminarPara una persona que ha currado toda su vida esto es ciencia exacta, pero en una momento en el que el trabajo es como el fantasma de Tres Solteros y Un Biberón (que nadie lo ve claro aunque otros afirmen rotundamente su existencia).
A día de hoy encontrar un puesto de trabajo es como si te tocara la lotería, y lo de los magnates es como si les tocara el gordo sin comprar un cupón.
Totalmente de acuerdo con el resto y a la espera de próximas revelaciones.
Herman@s, los que no pertenecemos al rebaño de obejas de estos señores capitalistas tenemos que seguir luchando de forma constante para no entrar en todos y cada una de las telas de Araña que nos tienen en cada una de las esquinas de la vida. Hay que estar muy alertas, aún así os prometo que he caido ya en más de una (PUTA HIPOTECA), pero cada vez que me acuerdo de ésta me da una "mala leche de la ostia"; mi ingenio se une a una alerta contante para que cada gota de mi sudor sea moderadamente gastado en lo que realmente necesito yo... y no en lo que realmente me dicen del exterior que es lo que necesito para ser un humano "del siglo XXI". Me gusta pensar que soy libre, tanto como si me "sale de las pelotas" hacerme una choza en el "Estrecho de Bering" para vivir allí "en pelotas" cubierto por la piel de un oso muerto de vejez...Lejos de todo el bombardeo mediatico al que estamos sometidos por estos Capitalistas que ya el dinero no les sacia, ahora quieren nuestra sangre. Que paseis un buen dia...
ResponderEliminarEs una experiencia extraordinaria e increíblemente interesante situarse en mitad de una tienda de Bershka o H&M cualquier tarde, y observar a la fauna esclava. Sus conductas de total focalización de la atención en los artículos hechos al efecto, el esfuerzo en transportar multitud de bolsas llenas de caprichos innecesarios, los rituales de amigas supermonas ellas inoculando su ansiedad a golpe de tarjeta paterna... podrías pegar gritos en pelotas allí mismo que todos van a lo que van: a la plantación, a consumir/trabajar para el tío de Zara y para los que están por encima de él, sin cobrar, claro, y encima es que estos putos zombis dan las gracias, y pretenden convertirte a tí a la religión del shopping.
ResponderEliminarPaseemos por Preciados, el Paseo de Gracia, Sierpes... y admiremos en su esplendor las grandes plantaciones esclavistas de nuestro tiempo. Las de los confederados americanos las podemos ver en grabados, pero estas, amigos, las podemos apreciar in situ y funcionando a todo trapo.