Hermanos, hermanas...
Efectivamente, como te digo la "A", te digo la "B". Con lo difícil que es en este mundo perro encontrar ocasiones para hablar bien del ser humano, cuando se presenta una, no es para desperdiciarla.
Todas estas plagas que están azotando el Japón, como si se tratase de una puta hecatombe bíblica, tienen la virtud o desgracia cuando ocurren de sacar a flote los caracteres / personalidades de los pueblos que las sufren. En este sentido, los japoneses constituyen una cultura que me produce una grandísima admiración.
Obsérvese que ante la jodidenda de magnitud mayor que sufren, estos tíos permanecen enteros, con la actitud digna, ordenados y atentos al protocolo (ese protocolo que les libra de ser trescientos mil muertos en vez de cinco o diez mil), sin arrollarse los unos a los otros, metiéndose el miedo por donde les cabe y plantando cara al dios sintoísta de turno que les haya mandado el pastel. Realmente parecen hechos de una pasta especial, como si el puto código del Bushido samurai lo llevaran en la sangre. Qué cabrones, qué buenos son...
En la mayoría de países, incluyendo por supuesto a los latinos como el nuestro, ya habríamos inundado los telediarios de funerales gitanos, ataques de histeria, llantos convulsivos, gritos pidiendo indemnización, indignaciones varias culpando del tsunami al gobierno, y asuntos plañideros por el estilo... que ya nos conocemos.
Sin embargo estos a los que los analfabetos llaman chinos, no sólo hacen al revés las huelgas o la formación educativa (ellos estudian), sino que también reaccionan al revés que nosotros en general, y muy posiblemente ahí radique esa cultura de superación... en cosas como el sentido común, la superación del miedo, la conservación de conceptos como el honor (que no la honra, entiéndanme, que de esa hemos tenido mucha en España y así estamos), y cosas así. Mientras que los japos se honran de ser autónomos y eficaces, nosotros nos honramos de pillar una paga de minusvalía por la cara y de que mi hija es todavía virgen, o eso dice ella.
Estos nipones son realmente la aristocracia del planeta, merecen el apellido Sapiens. Volverán a florecer como sus cerezos y saldrán de esta como de la conmoción del golpe a la conciencia colectiva en Hiroshima, y lo harán para ser aún mejores como cultura humana; estoy convencido. Estos tíos no se quejan, actúan. Son perros que no ladran y muerden. Siento hacer este comentario xenófobo pero, digo a los numerosos orgullosos de la cultura cañí (esa cultura de aspirantes a concejal de Fiestas Mayores, y de gallitos reivindicadores a las cajeras del Carrefour)... que estos "chinos", hoy por hoy, son una cultura superior.
Que el Señor los bendiga.
Podéis ir en paz.
miércoles, 16 de marzo de 2011
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En los medios de información con sus tertulianos de turno habían algunos que parecían que se indignaban por percibir a este pueblo como indolente ante las catástrofes ocurridas. Putos ignorantes de mierda. Están obviando que este pueblo se siente unido a la naturaleza y su tao y que por mucho sunami que les pase por encima éstos están más que enteros porque es la madre naturaleza la que dispone y no el puñetero mercado capitalista.
ResponderEliminar"En de mientras", como dicen algunos aquí, la tele y en internet, los occidentales nos bombardeamos con, que se cague la perra, "las mejores imágenes de desastres de estos últimos días en Japón. Ahí es na. Esto es un gran ejemplo de nuestro esquema antropocentrista supino e ignorante.
Como su bandera bien nos dice, son punto y aparte. Viva Japón.
Hablando de tertulianos, es horrible verlos enchaquetados y con aires de entender, hablando de fusión nuclear como el que es experto y además metiendo miedo injustificado, cuando no tienen ni pajolera idea. Resulta que tú mismo con un poco de información y curiosidad llegas a la conclusión correcta sin tener por qué tragarte las teorías del miedo y las chorradas agoreras y demagogas que sueltan por el boquino.
ResponderEliminarAprovecho la ocasión para aportardos videos en el que se ilustra a cerca de la diferencia entre el funcionariado japo y el español:
ResponderEliminarhttp://www.youtube.com/watch?v=4Y5rN80i8HY&eurl=http://www.dechiste.com/blog/2007/09/20/funcionaria-japonesa-nada-que-ver-con-los-espanoles/
http://www.youtube.com/watch?v=DMuH4bWf6j8&eurl=http://www.dechiste.com/blog/2007/09/20/funcionaria-japonesa-nada-que-ver-con-los-espanoles/
Mi mas sincera admiración a un megapueblo de autenticos luchadores capaces de afrontar una debastación apocaliptica. Son un ejemplo, y por ello el mundo está a sus pies. En España habría un millón de gilipollas con collarín pidiendo el seguro del tsunami y viviendas "dignas" de 200 metros cuadrados y TV de 42" de plasma junto al mar como compensación del desastre producido por la poca previsión del gobierno.
ResponderEliminarAporto una vieja historia sobre la diferencia entre españoles y japoneses:
ResponderEliminarSe celebró una carrera de remo japoneses y españoles. Se dio la salida y los japoneses acabaron ganando con una hora de ventaja.
La Dirección de la empresa española analizó las causas de la derrota y advirtió que el equipo japonés estaba compuesto por 10 remeros y un jefe de equipo, mientras que la tripulación española la componían 10 jefes de equipo y un remero, por lo que se decidió adoptar las medidas adecuadas.
Al año siguiente, la tripulación japonesa llegó dos horas y media antes que la española.
La Dirección se volvió a reunir y, tras un sonoro rapapolvo a la Gerencia, concluyeron que los japoneses habían repetido estrategia (10 remeros y 1 jefe de equipo) mientras que la innovadora tripulación española, por las medidas tomadas el año anterior estaba compuesta por: 1 jefe de equipo, 2 asesores a gerencia, 7 jefes de sección y 1 remero.
La conclusión de la Dirección fue unánime: la estructura debe variar y el remero es un incompetente.
Al año siguiente, tras encargar una innovadora estrategia y una embarcación puntera al departamento de nuevas tecnologías, la ventaja de los japoneses fue de cuatro horas.
El Equipo Directivo reunido para analizar las causas del nuevo desastre comprobó que el equipo nipón había optado por la ya tradicional formación (1 jefe de equipo y 10 remeros), mientras que el español, tras una auditoría externa y el asesoramiento especial del departamento de organización, optó por una formación mucho más vanguardista: 1 jefe de equipo, 3 jefes de sección con plus de productividad, 2 auditores de Calidad, y 4 vigilantes jurados que no quitaban ojo al único remero de la tripulación, al que habían amonestado y castigado quitándole los pluses e incentivos tras el fracaso del año anterior.
Tras varias horas de reuniones, se acordó que, para la regata próxima, el remero sea un becario o en su defecto, una contrata externa, ya que, a partir de la vigésimo quinta milla, se ha venido observando cierta dejadez en el remero de plantilla, actitud que roza el pasotismo y con comentarios por lo bajini del tipo:”El año que viene va a remar vuestra puta madre”.
Se hace ahora patente que las desgracias y el horror de una tragedia como la japonesa, e incluso una parte mínima de tal desgracia en España sería una puta hecatmobe. Adía de hoy el ejemplo de Lorca lo deja bien claro, pero ojito: hoy mismo sale a la palestra la noticia de que puede haber situaciones muy jodidas en Cádiz y en Huelva con ola de 14 metros. Adjunto la noticia.
ResponderEliminarhttp://www.20minutos.es/noticia/1080479/0/cadiz/tsunamis/olas/
Básicamente quien esté por debajo de los 10m por debajo del nivel del mar estaría bien jodido. Así pues sólo queda cruzar los dedos para que no pase lo peor, porque de ser así lo que está visto es que nos iban a tomar por el pito del sereno y la situación no sería más que un motivo más para que unos y otros de tiraran de la lengua y no de los pelos.
Que Dios reparta suerte y que no esté toda dada por enchufe cuando nos llegue el turno.